Hace poco me surgió un encargo diferente: pinchar música en una fiesta (principalmente de gente más bien mayor). Me pasaron una pequeña lista de temas que les gustaban con estilos que iban desde el disco de los 70, pasando por música española desde los 60 hasta los 90 y temas sueltos por ahí mas modernos. Vamos… una selección super variopinta de canciones que yo (en teoría) debía usar como base para elaborar una playlist de 3 horas de estilos “similares”.
Preparé la playlist y me dispuse a pinchar. Comencé con un tema de Abba de los que me habían puesto en su lista y todo bien, la gente bailaba. Me curré una transición al acabar el tema con otro tema muy en la onda: bombo a 4, disco 70’s, etc… La gente se paró en seco.
Se me acercó una mujer y me preguntó: “¿No ves que nadie baila? ¿Puedes poner otra música?”. Me quedé totalmente confundido… no entendía nada… Tampoco ella me supo sacar de dudas…
Al final entre las canciones de la lista y las peticiones reggetoneras de la chavalada que acompañaba a sus padres en la fiesta, la pinchada fue un éxito, y comprendí que no todo el mundo ama la música…
Me explico: Cuando preparé la lista pensé en mi forma de escuchar y descubrir música… Si hay algo que me gusta y escucho otra cosa que no conozco que es similar, es muy posible que me guste también… Esa fue un poco la idea al elaborar la lista de temas.
Pero con el fracaso estrepitoso de la música que había traido, me di cuenta de que mucha gente no opera de esta manera. A ellos no les importa el ritmo, la melodía, los detalles instrumentales, las voces o armonías… lo que quieren es ESE tema que conocen, que les gustó aquel día, que oyeron mogollón en aquellas vacaciones, que sonó el día que conocieron a esa persona especial o simplemente que a fuerza de sonar todo el día en la tele/radio acabaron por integrar…
Por eso daba igual el estilo: Escuchaban un tema de Abba y seguidamente pedían uno de Miguel Bosé, seguido de Rosalía, Raphael o Rafaela Carrá…
Obiamente me di cuenta que mi papel como “DJ” era absurdo… pero que se le va a hacer… Lo importante fue ver como mi forma de entender la música, de apreciarla y de escucharla era tan distinta a la suya…
Entendí por qué la mayoría de la gente no tiene un equipo de musica en casa, por qué hay discazos increibles que nadie escucha, ni conoce, ni le interesa conocer, y que al final los que amamos la MUSICA debemos ser unos pocos friquis, ahí con nuestros cascos o altavoces escuchando un mismo tema que acabamos de descubrir una y otra vez para desgranar cada detalle, cada nota…
Y no pasa nada… es lo que hay… Como alguien que creció en un entorno donde la música estaba muy presente es difícil de entender, pero quizás lo que me jode más es ver que en el fondo hay un poco de esa actitud (escuchar lo que conoces y poco más) incluso en personas que amamos la música (y me incluyo, porque peco de ello también a veces…)
También tenemos tendencia a idealizar a determinados artistas clásicos o de éxito sin luego querer ver la cantidad de gente que hay haciendo música en esos estilos, buenísima, pero que pocos se paran a escuchar.
Fuí a ver a The Whiffs al Fun House esta pasada primavera. Hablando con uno de los guitarras me comentaba que en su ciudad van 4 a verles tocar, y flipaban con la gente que vino a verlos en los conciertos de la gira por España… que al fin y al cabo era una gira por salas pequeñas cuando estos tíos están haciendo discazos dignos de cualquier grupo de Power Pop de los 70 que muchos idolatramos hoy en día… y para más inri, muchos de esos grupazos en su día no se comieron un colín tampoco…
¿¿¿Estamos locos???
También me jode como músico, porque vivimos en una época en la que ya es suficientemente difícil abrirse paso entre la infinidad de grupos y proyectos musicales como para que ni tu público potencial te escuche porque se quedó anclado en sus “grupos favoritos” del estilo que sea…
Por suerte aún hay gente que, si viene alguien a tocar lo escucha un poco, ve que es de su onda y directamente se compra la entrada y va. A veces con mejor o peor fortuna, pero he de decir que algunos de los mejores conciertos a los que he ido ha sido así: sin conocer a la banda y por la mera curiosidad de escuchar algo nuevo en directo…
¿Y tú, amas la música?